El gato que quería conducir

Un gato quería conducir pero los otros gatos le decían que se podía matar. El gato no les hacía caso, así que fue a la autoescuela. Pero los hombres no le entendían porque era un gato, así que el gato le mordió pero seguía sin entenderle, por lo que puso la autoescuela patas arriba hasta que les arruinó el negocio y se fue corriendo. Le pilló el de la autoescuela pero se escapó y corrió y corrió y se escondió. Cuando se fue el de la autoescuela le robó el coche y la ropa y se hizo pasar por el de la autoescuela para siempre.

                                                                    Pablo

No hay comentarios:

Publicar un comentario